Me vuelvo loca con las raglan

También conocida como manga Ranglan (sí, está bien decirlo de cualquiera de las dos maneras). Es la manga ideal para volverse laaaaaca con el patronaje y hacerla todo lo exagerada que les de la imaginación.

Hoy domingo llueve a cántaros en Trelew y yo aquí disfrutando lo que amo: cerca de una ventana con mi laptop, el mate y blogueando 🥰. Esta vez quiero compartir con ustedes el paso a paso para hacer el patrón de un ¿top? ¿sweater? ¿jersey? ¿buzo?… la verdad, no se cómo llamarlo.

Lo único que se, es que me inspiré en este diseño de Bottega Veneta:

Y lo tuve MESES guardado en mi tablero de Pinterest, hasta que por trabajo viajé fugazmente a Nueva York y tuve la oportunidad de escaparme una mañana a la maravillosa Mood Fabrics. En donde me atendieron de maravillas y tuve el placer de escuchar los consejos de las personas que trabajan allí, como mi amigo DeShawn:

Allí en Mood, encontré una sección exclusivamente dedicada a tejidos de punto 100% lana y me dije «ahora o nunca».

Y volví a casa feliz con un tejido muy tupido gris melange con dibujos estampados en gris oscuro y plateado ideal para reflotar la foto de Bottega Veneta:

Una vez elegido el diseño (o más o menos) y el tejido, me faltaba dibujar la prenda final y transformar mis patrones base. El proceso fue más rápido de lo que pensé, por eso decidí compartirlo con ustedes para que puedan hacerlo con sus medidas.

Este tipo de mangas se puede adaptar a muchas prendas, incluidas chaquetas y bluzas, solo tienen que tomar la parte del proceso que les interese.

Mi prenda tiene un cuello media polera o tortuga, que forma parte del delantero y de la espalda. Es decir, no tiene costura de escote. Además, es un solo cuerpo entero, sin pretina de cintura. Está entallado en el bajo y en los puños, con holgura en los hombros, sisas y mangas superiores. En la costura de espalda tiene un cierre invisible de 24 cm, ya que mi tejido no tiene elasticidad.

Para comenzar, necesitan su patrón de cuerpo base. Si aún no lo realizaron, pueden seguir este tutorial. Antes de empezar, le trasladé la pinza de busto hacia la de talle, para que me quede así:

Si no saben o no recuerdan cómo hacerlo, les dejo este video en mi canal de YouTube para que puedan dominar el traslado de pinzas. Una vez listo el patrón base con la pinza solo en el talle, le deben agregar el largo que quieran a la prenda. Yo le sumé 14 cm por debajo de la línea de cintura, pero es a gusto del consumidor 😉.

Vamos a aplicar la holgura (o flojedad del cuerpo): primero tracen líneas horizontales en la base de la sisa (recuerden que al cerrar la pinza de busto, la línea de base de sisa queda en diagonal), la cintura y el bajo. Salgan 2 cm en la sisa, 1,5 cm en la cintura y 1 ó 0,5 cm en el bajo.

Por último, bajen entre 3 y 4 cm la base de sisa y redibujen la curva de sisa como muestro aquí:

Repitan los mismos pasos en el patrón de espalda.

Midan el contorno de escote delantero y de espalda y realicen un rectángulo de 4 cm de alto y el ancho del contorno que acaban de medir:

En el extremo delantero, suban 2 cm y tracen una curva que vaya desde esta marca hasta el piquete de hombro. Chequeen la medida del escote delantero y corrijan de ser necesario.

Cierren la curva superior para terminar de dibujar el cuello, como muestra el dibujo:

Una vez listo, tomen la medida superior de cada tramo (el delantero y la espalda), vamos a trasladarla al cuerpo.

Comenzando por el delantero, continúen la línea de hombros en una diagonal no muy brusca. Midan 4 cm en esta diagonal y marquen puntos a 4 cm sobre la línea de escote. Tracen una línea curva uniendo los puntos y marquen la medida que tomaron del contorno superior del cuello.

Luego cierren con una diagonal de 4 cm al centro delantero. Es muy probable que les haya quedado un cuello con líneas muy toscas y en punta. Suavicen estas líneas de modo que nunca queden puntas en ángulos muy cerrados. De ser necesario, muevan todo el cuello hacia atrás.

Luego suavicen las uniones con una regla de curvas. Repitan el mismo proceso en la espalda.

Una vez listo el cuello, dibujen la manga raglan como les guste, partiendo desde el piequete de aplomo de sisa. Yo aquí les dejo las medidas de la mía: marqué la línea original del escote y luego otra línea a 2 cm. Sobre esta segunda línea, marqué un ancho de 4 cm.

Redondeen y suavicen todo con una regla de curvas.

En otro papel, tracen su manga base. Si todavía no la tienen hecha, aquí les dejo un paso a paso. Luego modifiquen la manga base con las mismas medidas de holgura que hicieron en el cuerpo: si en el cuerpo agrandaron el lateral 2 cm, en la manga también. Si bajaron la base de sisa 3 cm, en la manga también.

Corten la manga al medio, en sentido vertical. Luego corten el tramo de raglan que hicieron en el cuerpo delantero y espalda.

Tomen la mitad de la manga (da lo mismo si es la espalda o el delantero) y peguen esta parte sobre un papel más grande. Luego unan el tramo de raglan que le corresponde, uniendo por los piquetes de aplomo y dejando una separación de 2 cm en la copa de manga.

Tracen una línea horizontal en la base de copa. Marquen 10 ó 12 cm desde el centro de manga y tracen otra línea paralela al centro. Suban 4 cm por esta línea y marquen un punto. Unan el extremo superior de la raglan con este punto, usando una curva suave.

Luego unan el extremo de la curva que acaban de dibujar, con la línea del antebrazo, siempre en curvas suaves. Y terminen de suavizar la sisa.

Repitan el mismo proceso con la otra manga. Pero ¡atención! Dado que la manga trasera es bastante diferente a la delantera, copien los diferentes lados para estar 100% seguras de que quedan las costuras iguales. De ser necesario, corrijan la curva chequeando con la cinta métrica la medida. No importa sin las curvas de cada tramo son diferentes, lo que importa es que midan lo mismo.

¡Listo mi gente! Ya tienen su patrón terminado 💪💪💪.

Como mi modelo tiene costura en el centro delantero y mi tejido es estampado, corté izquierda y derecha por separado, marcando la continuación del dibujo:

Luego uní todas las partes con hilván y lo probé en el maniquí. Solo le hice algunos ajustes en las pinzas inferiores para que me quede más entallado en la cintura ¡y listo!

La costura fue un placer. Este tejido es como una manteca, grueso pero suave para la aguja. No se estira, así que no tuve ningún problema para las costuras en curva.

Como tampoco se deshilacha, no tuve que hacer ninguna terminación ni surfilado a los márgenes de costura, solo los planché abiertos y en algunos casos los cosí a mano para que queden bien chatos.

Quedó hecho un primor:

Les cuento que ya el día del estreno esta prenda despertó comentarios y «piropos» (como le decimos en Argentina a los halagos) por todos los lugares a donde fui 😎.

Todavía no se si es que realmente la prenda quedó espectacular, o si yo me siento una reina con esto puesto e irradio energía. Aunque creo que es un poco de las dos cosas ¿qué dicen?

¡Les dejo un beso enorme y gracias por acompañarme! 😘😘😘